María Claudia Tarazona, esposa de Miguel Uribe Turbay, apareció en las escaleras de la entrada a la Clínica Santa Fe y entregó una noticia esperanzadora: el senador resistió a una intervención quirúrgica que inició a las 8:30 de la noche del sábado –horas después del atentado– y que se extendió hasta la madrugada de este domingo.
“Salió de la cirugía. Lo logró. Cada hora es una hora crítica. Dio la primera batalla y la dio bien. Miguel sigue luchando. Les pido que sigamos en oración, no desfallezcamos”, señaló la mujer.
Cuando se conoció del atentado, el teléfono del doctor Fernando Hakim, jefe del Departamento de Neurocirugía del Hospital Universitario Fundación Santa Fe, replicó con insistencia.
Él y su equipo tuvieron la tarea de operar con emergencia al senador y precandidato del Centro Democrático.
El doctor Hakim tiene más de 30 años de trayectoria. Es especialista en áreas que incluyen patologías del cerebro, la médula espinal y la columna vertebral. Es médico cirujano graduado de la Universidad Militar Nueva Granada, con una especialidad en Neurocirugía en el mismo claustro.
El político de 39 años ingresó en estado crítico y fue sometido a procedimientos neuroquirúrgicos y en el muslo izquierdo. Tras la operación, fue trasladado a la Unidad de Cuidados Intensivos para su estabilización postoperatoria.
En este punto EL COLOMBIANO conoció que el procedimiento fue adelantado y luego suspendido debido a la inflamación del paciente. El cuerpo médico acordó retomar acorde a su evolución. Pueden ser varios sus ingresos al quirófano.
Harold Úsuga, expresidente del capítulo Antioquia de la Asociación Colombiana de Neurocirugía, le explicó a este diario que la maniobra realizada por el equipo de Hakim muchas veces determina la vida de un paciente.
Este diario confirmó que la operación consistió en una craniectomia descompresiva; esta es una cirugía que consiste en retirar una porción del cráneo para reducir la presión intracraneal y dar más espacio al cerebro. Se utiliza principalmente en casos de traumatismos craneoencefálicos graves (ver gráfico).
“Es una medida salvadora, así de sencillo. Si no se realiza en las horas siguientes el paciente fallece. Se quita un pedazo de cráneo para que el cerebro pueda respirar o expandirse”, apuntó el experto.
El neurocirujano consultado añadió que la medida realizada en la Clínica Santa Fe puede evitar complicaciones como hemorragias, infartos cerebrales o paros cardiorespiratorios.
“Este tipo de procedimientos se debe realizar en las primeras seis horas para que los pacientes tengan un beneficio real. Las horas son vitales para que los pacientes tengan un buen pronóstico”, apuntó Úsuga.
El procedimiento que le hicieron a Uribe Turbay suele aplicarse también a pacientes con tumores cerebrales, con infecciones cerebrales u otras lesiones vasculares, no necesariamente por traumas o ingresos de proyectiles.
“El proyectil no suele ser extraído porque queda incrustado en el seno sagital, que es una vena grande que hay en el cerebro, entonces hay riesgos de hemorragia que no se pueden controlar en cirugía y el paciente puede fallecer. Probablemente esa esquirla no será extraída y se va a quedar allí de manera indefinida”, apuntó Úsuga.
¿Qué viene después de la cirugía?
Sobre las 9:20 de la mañana de este 8 de junio, la Clínica Santa Fe publicó el segundo reporte médico de Uribe Turbay:“El estado reviste la máxima gravedad y el pronóstico es reservado”, apuntó Adolfo Llinás Volpe, director del centro asistencial. La primera intervención se completó con éxito: todo salió según el plan médico y Uribe sigue con vida tras la delicada operación. El equipo mantiene una vigilancia estricta, con cuidados en UCI las 24 horas, incluyendo soporte respiratorio y monitoreo neurológico intensivo.
Con el pasar de las horas se conocerá si se mantiene la intubación o hay progresos en función respiratoria. También si hay cambios en la presión intracraneal, inflamación. Los médicos también están atentos a la lesión que sufrió en su pierna izquierda. En la noche del domingo, cientos de ciudadanos permanecían a las afueras de la clínica en vigilia por la salud del precandidato presidencial.
