Falta menos de un año para las elecciones presidenciales y legislativas que definirán el periodo político 2026-2030; y el panorama político se mueve, acomoda y agrupa en nuevos (y viejos) partidos y estrategias.
Se puede decir que es la resurrección de Cristo, pero del exministro, no del hijo de Dios. La Corte Constitucional le devolvió la personería jurídica al movimiento En Marcha, que lidera el exministro del Interior, Juan Fernando Cristo, y cuya personería jurídica había sido revocada por el Consejo de Estado.
Respecto a la decisión que había tomado el Consejo, la Corte recibió una tutela por parte de la colectividad, que había conseguido su personería jurídica en 2022, al ser parte de la Coalición Centro Esperanza. Aquella vez consiguieron un millón 900 mil votos, que les resultó suficiente para tener 13 puestos en el Senado.
Guido Echeverri, Jairo Castellanos y Gustavo Moreno fueron parte del Senado en representación de la agrupación política de Cristo. Aunque, en los documentos oficiales, los congresistas tuvieron el aval de la Alianza Social Independiente, ASI. En ese momento no fue un impedimento para mantener su estatus de partido político. Sin embargo, tiempo después, eso fue lo que causó problemas.
El Consejo de Estado determinó que eran representantes legales de ASI, no de EN Marcha, por lo que anuló la personería jurídica del partido.
“La militancia y elección de los señores Guido Echeverri Piedrahíta, Jairo Alberto Castellanos Serrano y Gustavo Adolfo Moreno Hurtado por la colectividad política En Marcha, es falsa. Lo anterior, en tanto, se demostró que la militancia, aspiración democrática y posterior elección de aquellos como senadores de la República se realizó con el aval del partido Alianza Social Independiente y no en representación de En Marcha”, sentenció.
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La tutela del partido (que llegó a la Corte Constitucional) alegaba vulneración al debido proceso. Aquella tutela llegó, más específicamente, al despacho del magistrado Vladimir Fernández, exsecretario jurídico de la Casa de Nariño al inicio del gobierno de Gustavo Petro, quien lideró la ponencia. La Corte votó, por unanimidad, para que se le devolviera la personería jurídica a EN Marcha.
Además, la Corte Constitucional determinó que el caso sobre la personería jurídica del partido debe ser reenviado a la Sección Quinta del Consejo de Estado, la cual tendrá un plazo máximo de 30 días para emitir un nuevo fallo que respete los derechos del movimiento político.
Según la orden de la Sala Plena, el Consejo de Estado deberá revisar nuevamente la validez de las resoluciones 5527 del 15 de diciembre de 2022 y 1929 del 8 de marzo de 2023 del Consejo Nacional Electoral, específicamente en lo relacionado con el reconocimiento de la personería jurídica del partido.
La Corte aseguró que este proceso deberá realizarse sin que los candidatos del partido sean señalados por doble militancia.
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Finalmente, el concepto de la Corte asegura que “la agrupación política En Marcha hizo parte de la coalición política Alianza Verde y Centro Esperanza (AVCE) y suscribió para ello un acuerdo de coalición; tenía registro ante el Consejo Nacional Electoral como movimiento político sin personería jurídica; su logo fue incluido en el tarjetón electoral; y demás pruebas que acrediten la existencia previa de esa agrupación y su participación en el proceso electoral correspondiente”.
Esto marca un precedente importante de cara a las elecciones presidenciales y legislativas de 2026, puesto que abre las puertas para revivir a otros partidos anulados por el Consejo de Estado, como Soy Porque Somos de la vicepresidenta Francia Márquez; Todos Somos Colombia, de Clara López; Creemos, de Fico Gutiérrez, o Independientes, de Daniel Quintero.
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