La Federación Colombiana de Enfermedades Raras (Fecoer) denunció este martes el fallecimiento de Maritza Ramírez Capacho el pasado 4 de septiembre. La mujer era una paciente diagnosticada con enfermedad rara de hipertensión pulmonar grupo 1 y, dice la organización, estuvo esperando 11 meses el medicamento treprostinil subcutáneo, que era vital para evitar el deterioro y riesgo de muerte por falla cardiaca.
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Según la denuncia, Maritza no recibió desde octubre de 2024 su tratamiento por trámites administrativos de la Nueva EPS, lo que le ocasionó una descompensación grave y que tuviera que ser hospitalizada en una unidad de cuidados intensivos.
“Ella los pidió, los exigió, reclamó lo que por ley le correspondía. El Estado y la EPS le fallaron”, denunció Fecoer en sus redes sociales.
En ese sentido, señaló que cuando la aseguradora —a la cual estaba afiliada— le entregó el medicamento “ya era demasiado tarde” y que “ese retraso fue una sentencia de muerte injusta, inhumana e inaceptable”.
Al respecto, la Federación expresó que “lo ocurrido con la señora Maritza es responsabilidad de un sistema negligente que sigue arrebatando vidas. Su muerte no fue natural: fue abandono institucional”.
En agosto pasado, Ramírez dijo en un video (compartido en las redes de Fecoer) que no le entregaban el tratamiento por el alto costo y que “siempre tienen un inconveniente con la fórmula y con una cosa y con la otra para no hacer entrega”.
“Desde octubre (de 2024) el medicamento se terminó, la Nueva EPS no me lo entrega. Hemos hecho tutelas, hemos interpuesto quejas ante la Defensoría del Pueblo, ante la Supersalud y no hemos podido ser escuchados. Esto me ha conllevado a que mi enfermedad haya avanzado un poco más, ya que de octubre a febrero estuvo con donaciones que me conseguía la chica que me hace el acompañamiento”, dijo entonces Maritza.
En ese entonces afirmó no contaba con ninguna de las tres medicinas que necesitaba, lo cual, aseguró, que “algo tan sencillo como caminar, agacharme o bañarme (...) para mí se vuelva algo imposible”.
“Exigimos verdad, justicia y un cambio real. Porque la vida de la señora Maritza importa. Porque ninguna otra familia debe pasar por esta tragedia evitable. ¡Basta ya de negligencia criminal en la salud!” concluyó Fecoer en su denuncia.
EL COLOMBIANO le preguntó a la Nueva EPS si harían un pronunciamiento sobre este caso, pero hasta ahora no ha recibido respuesta.
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