En el actual proceso, han sido múltiples las veces en que el club verde termina los partidos con menos hombres, por lo que es una situación a corregir.
Atlético Nacional volvió a ganar, esta vez por la mínima diferencia (1-0) ante Cúcuta Deportivo por la ida de los playoffs de octavos de final de la Copa Betplay. Pero, pese al resultado favorable, el técnico Javier Gandolfi no terminó satisfecho del todo. No por el rendimiento ni por el marcador, sino por una tendencia que empieza a preocupar profundamente en el proceso que él lidera: una vez más, el equipo terminó con un hombre menos.
La expulsión de turno volvió a trastocar los planes del entrenador argentino, quien no dudó en referirse con franqueza al tema en la rueda de prensa posterior al compromiso. “Obviamente que la idea es terminar siempre con 11 jugadores. Es un tema a tratar, lo hablamos y tratamos de corregirlo. Cuando es por una acción de juego es parte del fútbol, pero cuando nos dejamos llevar por las emociones y nos quedamos con un hombre menos, ahí sí es un tema más profundo para mejorar”, expresó Gandolfi con tono serio, reflejando una preocupación que va más allá de lo táctico.
Y no es para menos. Las expulsiones se han convertido en una constante incómoda para el conjunto verde en este proceso. Lo que en ocasiones puede parecer un infortunio aislado, en Nacional ya empieza a convertirse en una alerta estructural. Jugar con 10 ha sido más habitual de lo que el cuerpo técnico y los hinchas quisieran, afectando el desarrollo de los partidos y limitando la aplicación de estrategias trabajadas en la semana.
Gandolfi también contextualizó el fenómeno dentro del marco competitivo colombiano. “Seguiremos trabajando en ese punto porque en el fútbol colombiano es una de las ligas donde más expulsiones hay”, apuntó, dejando ver que el problema no es exclusivo del club paisa. Aun así, el entrenador dejó claro que eso no puede ser una excusa para dejar de exigir un mayor control emocional y disciplina táctica a sus jugadores.
“El fútbol que vivimos hoy en día hace que tener un hombre de más sea una ventaja importante, pero creo que Nacional lo hizo bien en este partido con un hombre menos”, destacó también, valorando la respuesta del equipo en la adversidad y la capacidad de sostener la ventaja frente a un Cúcuta que nunca dejó de presionar.
Con la ventaja parcial de 1-0 en la serie, Atlético Nacional deberá viajar al estadio General Santander el próximo martes 5 de agosto para disputar el partido de vuelta, que se jugará a partir de las 4:00 p.m. en la calurosa ciudad de Cúcuta. El objetivo está claro: avanzar a la siguiente ronda, pero también demostrar que se puede jugar un partido completo con el equipo en plenitud.
Más allá del resultado, el verdadero desafío parece estar en el control emocional y en mantener la concentración durante los 90 minutos. Porque como bien lo dijo Gandolfi, cuando una expulsión se da por una acción inevitable del juego, se puede entender; pero cuando es el temperamento el que juega en contra, se vuelve un tema de fondo que compromete el crecimiento del proceso.
Atlético Nacional gana, pero también aprende. En medio de un torneo donde cada detalle cuenta, terminar con 11 jugadores se ha vuelto, curiosamente, una de las tareas más urgentes para un equipo que quiere competir con altura y sin condicionantes.
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