En medio de los rituales de despedida del papa Francisco, este viernes se llevará a cabo el cierre del féretro, donde uno de los participantes ha despertado polémica, pues ha sido acusado de encubrir casos de pederastia.
Se trata de Roger Mahony, arzobispo emérito de Los Ángeles. El religioso de 89 años ha sido señalado por no cooperar con las autoridades en casos de denuncia sexual ni expulsar a los sacerdotes involucrados.
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El cardenal estadounidense dirigió la Arquidiócesis de Los Ángeles desde 1985 hasta el 2011. Dos años más tardes, registros internos de la iglesia revelaron que Mahony y su vicario no cooperaron ni expulsaron a los sacerdotes que al parecer habían abusado de menores de edad. El religioso ha ofrecido en reiteradas ocasiones perdón por la gestión de dichos casos.
En el año 2013, el cardenal Mahony fue separado de su cargo, pues el arzobispo José Gómez confirmó que “ya no tendrá ningún deber administrativo o público”.
Entre 1950 y 2013, la Iglesia estadounidense recibió denuncias de aproximadamente unas 17.000 víctimas de abusos cometidos por unos 6.400 miembros de su clero.
Según expertos del Vaticano, cerca de 100.000 menores de Estados Unidos y Canadá sufrieron abusos. Varios obispos importantes tuvieron que renunciar por haber cerrado los ojos ante dichos casos, incluidos los cardenales Roger Mahony (Los Angeles) y Bernard Law (Boston).
Pese a este antecedente, el estadounidense participará en el ritual del cierre del féretro debido a que, dentro del Colegio Cardenalicio, figura con el cargo de cardenal presbítero, un alto cargo dentro de la institución que se le ha otorgado a Mahony por ser de los de mayor experiencia.
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En este ritual, se leerá un acta que recuerda la vida y obra del difunto, luego, esta será firmada por los asistentes a la ceremonia, quienes la ingresarán a un tubo de metal y luego la colocarán en el ataúd. Posteriormente, se cubrirá el rostro del papa con un velo blanco de seda y colocarán algunas monedas acuñadas durante su pontificado.
No es la primera vez que la participación de este cardenal en una de las ceremonias despierta controversia. Justo en el 2013, algunos cuestionaron su participación en el cónclave, pues en ese entonces, al ser menor de 80 años, podía votar para la elección del sumo pontífice.
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*Con información de AFP