En el corazón de Colombia, donde seis de cada diez hogares operan bajo el paraguas de la Ley 675 de 2001 de Propiedad Horizontal, los conflictos en conjuntos residenciales son tan comunes como cualquier otra situación en esos lugares.
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Desde el monto de la administración hasta el uso de la piscina, la mayoría de estas fricciones nacen de una raíz popular: la falta de claridad o el simple desconocimiento del reglamento interno de la copropiedad.
Un reglamento bien estructurado es la brújula que guía y establece los estatutos y responsabilidades de la comunidad en la copropiedad. Por eso, a continuación, le contamos cuáles son los cinco puntos de discordia más recurrentes en estos espacios.
1. Disputas por áreas comunes: la ambigüedad en la clasificación de los bienes comunes dentro de las unidades residenciales es un clásico generador de peleas entre las personas.
2. Cuotas de administración en entredicho: cuando el cálculo de las cuotas parece un enigma entre la comunidad, la tensión es inevitable y lleva a tener problemas.
3. Conductas inapropiadas sin consecuencia: los ruidos molestos, fiestas a deshoras o el incumplimiento de normas, es otro factor de disputas en caso de no tener un reglamento claro.
4. Decisiones colectivas en el limbo: la Asamblea General, el Consejo de Administración y el Administrador son los cerebros de las copropiedades. Sin un reglamento claro, las decisiones se estancan.
5. Desconfianza por finanzas: según Properix más del 70% de los copropietarios bogotanos no recibe informes financieros mensuales detallados. La transparencia financiera en estos casos es importante.
Esta es la solución que ofrecen las plataformas digitales
Se trata de Properix, una plataforma enfocada en la administración de conjuntos residenciales que propone diferentes herramientas para resolver los continuos conflictos dentro de las copropiedades a través de la tecnología.
“La transparencia no solo fortalece la confianza, sino que estimula la participación y el sentido de pertenencia en las comunidades residenciales”, aseguró Daniel Laverde, gerente comercial de Properix en Colombia, a EL COLOMBIANO.
Para transformar estas comunidades, Properix, a través de su novedoso sistema tecnológico, recomienda la adopción de herramientas digitales como:
- Crear una biblioteca digital accesible con reglamentos y actas siempre actualizadas.
- Utilizar notificaciones programadas por correo electrónico para mantener a todos informados de manera proactiva.
- Implementar un sistema inalterable de documentos que ofrezca claridad sobre las versiones y fechas de aprobación, disipando cualquier duda.
