La directora de Recursos Humanos dejó su cargo en Astronomer días después de la dimisión del CEO Andy Byron, ambos envueltos en un escándalo viral tras ser captados por la ‘kiss-cam’ durante un concierto de la banda británica en Boston.
La directora de recursos humanos de Astronomer, Kristin Cabot, renunció a su cargo días después de que lo hiciera el director ejecutivo de la compañía, Andy Byron, tras hacerse viral un video en el que ambos fueron captados durante un concierto de Coldplay en Boston (EE. UU.).
“Kristin Cabot ya no trabaja en Astronomer, ha renunciado”, confirmó un portavoz de la empresa a CNBC. En el video, Byron —casado y con hijos— aparece abrazando a Cabot mientras intentan ocultarse de la cámara al ser mostrados en la popular ‘kiss-cam’, que suele enfocar a parejas en este tipo de eventos. La escena, que acumula millones de reproducciones en redes sociales, fue comentada en vivo por Chris Martin, vocalista de la banda, quien bromeó: “Uy, mira a esos dos: o están teniendo una aventura o son muy tímidos”.
El escándalo provocó la renuncia de Byron el sábado, 19 de julio, seguida ahora por la dimisión de Cabot. Sus nombres han sido eliminados de la página web corporativa.
Pete DeJoy, cofundador y director de producto de Astronomer, asumió como CEO interino. En una publicación reciente, DeJoy reconoció que la atención mediática ha convertido a la empresa en “un nombre familiar” y reiteró que la compañía mantiene su compromiso con los valores y la conducta ética.
“Astronomer está comprometido con los valores y la cultura que nos han guiado desde nuestra fundación. Se espera que nuestros líderes marquen la pauta tanto en conducta como en responsabilidad, y recientemente, esa pauta no se cumplió”, señaló la empresa en su cuenta de X.
La junta directiva ya inició la búsqueda de un nuevo director ejecutivo, mientras DeJoy continúa de manera interina al frente de la compañía.
Kristin Cabot, quien se unió a Astronomer en noviembre de 2024 como directora de Recursos Humanos. En su perfil en la red laboral, LinkedIn, donde contaba con más de 500 contactos, se describía como “una apasionada líder de personas, conocida por crear culturas galardonadas desde cero para empresas emergentes de rápido crecimiento y corporaciones multinacionales”. Tras la viralidad del incidente, Cabot eliminó su perfil en la plataforma profesional y restringió sus cuentas en redes sociales.
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