En un gran operativo adelantado por la Fiscalía General de la Nación y la Policía Nacional, fueron cobijados con medida de extinción de dominio dos inmuebles en Medellín, avaluados en más de $1.000 millones. Los bienes, según la investigación de las autoridades, tendrían vínculos con Roberto Escobar, alias el “Osito”, hermano del asesinado jefe del Cartel de Medellín, Pablo Escobar, así como de quien fuera su jefe de sicarios, Sebastián Alzate Urquijo, alias “Arete”.
Los elementos probatorios que obtuvo la Fiscalía señalan que ambos inmuebles fueron adquiridos con plata del narcotráfico y otras actividades criminales.
Uno de los inmuebles, cuyo valor no fue especificado por parte de las autoridades, figuraba a nombre de una persona cercana a Alzate Urquijo’, sanguinario jefe de sicarios del extinto cartel. Tras adelantar los análisis patrimoniales, las pruebas sugieren que el inmueble se compró cuando alias “El Arete” amasaba una fortuna al pertenecer al cartel que enviaba miles de toneladas de cocaína a Estados Unidos, así como por las actividades terroristas que ejecutaba.
En cuanto al otro inmueble, un edificio en el barrio Aranjuez, se comprobó que fue adquirido en un 50% por el hermano de Escobar. También en este caso la Fiscalía señala que el dinero para dicho negocio provino de actividades relacionadas con el narcotráfico.
Por tal razón, la investigación asegura que tanto “El Arete” como “El Osito” hicieron parte activa de la consolidación financiera del cartel de Medellín, utilizando cientos de testaferros, entre amigos y familiares, para ocultar los bienes provenientes de las actividades ilegales.
Un fiscal de la Dirección Especializada de Extinción del Derecho de Dominio ordenó la suspensión del poder dispositivo, embargo y secuestro de los dos bienes, en un paso más de las autoridades para recuperar bienes de organizaciones criminales.